El término setsubun (節分) en japonés significa “cambio de estación del año”. Habiendo 4 estaciones, existen 4 setsubun: de primavera a verano, de verano a otoño, de otoño a invierno y de invierno a primavera. Este último ha sido el más significativo y el único que se celebra, por lo que al mencionar setsubun, la celebración en la que debemos pensar es en el fin del invierno y el inicio de la primavera (aunque en realidad, tiene su propio nombre en japonés: risshun立春). 

La fecha en la que se festeja el setsubun varía entre el 2 y el 3 de febrero, dependiendo del calendario lunisolar. ¿Qué se celebra en esta fecha? Ciertamente se da la bienvenida a la primavera que llega para remplazar al frío invierno, pero lo más importante en el setsubun es ahuyentar a los demonios y atraer la buena suerte no sólo para la estación, sino para todo el año. Para lograr esto, los japoneses siguen una serie de rituales, de entre los cuales destacaremos tres: el mamemaki (豆まき), el ehōmaki (恵方巻き) y el hīragi Iwashi (柊鰯). 

 

Mamemaki (豆まき) 

De acuerdo a las supersticiones japonesas, los demonios son los causantes de males como la pobreza y la enfermedad, es por ello que un ritual importante durante el setsubun, es el mamemaki (豆まき ), que se realiza precisamente con el fin de ahuyentar demonios. Este ritual consiste en arrojar semillas de soja a una persona que porta una máscara de demonio. ¿Por qué se hace esto? Existen dos versiones de su origen. 

La primera versión cuenta que hace mucho tiempo en Kioto, existía un demonio que causaba muchos problemas a los habitantes. El pueblo sufría mucho hasta que un día los habitantes, desesperados, comenzaron a arrojar semillas de soja al demonio, hasta que alguien logró darle en el ojo. Al instante, el demonio huyó, dejando tranquilo al pueblo. Se dice que desde entonces se realiza este ritual. 

La segunda versión tiene que ver con la superstición japonesa de la polisemia, en la que palabras con la misma pronunciación mezclan sus significados. En japonés, los demonios son llamados “akuma” (悪魔), y ojo se dice “me” (目), por lo que “akuma no me” (悪魔の目) significa “ojo del demonio”. Pero sucede entonces que al juntar el segundo kanji de akuma y el de me, se pronuncia igual a la palabra que utilizan para decir “semillas de soja”, es decir, “mame” (豆). Esto no podría ser simple coincidencia y de ahí viene la superstición, en la cual al arrojar semillas de soja a los ojos del demonio lo ahuyenta, y por eso el ritual es llamado de esta forma.  

Este ritual se realiza en los hogares, en escuelas y en templos. Para realizarlo, es necesario que la persona a cargo (supongamos el padre en el hogar o el director en la escuela), se coloca una máscara de demonio (o incluso un disfraz completo) y los niños o demás miembros arrojan semillas de soja gritando “¡Oni wa soto! ¡Fuku wa uchi!”(鬼は外, 福は内), que podemos traducir como “¡Fuera el demonio! ¡Que venga la buena suerte!”.  

Pero eso no es todo. Otra parte del ritual consiste en comer las semillas de soja. El número de semillas que cada persona debe comer tiene que ser igual a su edad, más uno por el año que viene. Por ejemplo, si tengo 20 años, debo comer 21 semillas. Como dato, es muy común que al comprar las semillas en las tiendas o mercados incluyan la máscara del demonio.  

 

Ehōmaki (恵方巻き ) 

Otro ritual importante durante el setsubun es el ehōmaki (恵方巻き), también llamado el sushi maki de la suerte. El sushi maki es un rollo de sushi completo, es decir, sin cortar, y el ritual consiste en comer el rollo completo sin que se rompa, sin hablar al comer y mirando en una dirección específica, llamada ehō (恵方), que se considera “la dirección de la suerte”. Esta dirección suele variar dependiendo el horóscopo del año nuevo chino que comienza, con base en una brújula del calendario zodiacal. Se dice que si el rollo de sushi no se rompe al comerlo nos irá bien durante todo el año, y que, en caso contrario, si se rompe nos traerá mala suerte. 

 

Hīragi Iwashi (柊鰯) 

Este ritual es el más antiguo de los mencionados y el que menos se ve hoy en día. Su nombre proviene de hīragi (柊) que significa “acebo” e iwashi (鰯) que significa “sardina”, y es precisamente lo que se necesita para realizar este ritual. Consiste en comer sardinas y colocar sus cabezas en ramas de acebo. Posteriormente, estas ramas con las cabezas de sardinas deben colocarse en ventanas y puertas de las casas. Se cree que el olor de las sardinas ahuyenta a los demonios.  

 

De los tres rituales, sin duda el más representativo es el mamemaki, que se considera un ritual familiar, pero no podemos negar que el ehōmaki y el hīragi iwashi también son llamativos. ¿Conocías estos rituales? ¿Qué te parece el setsubun? Compártenos en los comentarios.