Sabemos que la fiesta de carnaval es una constante en muchos lugares del mundo con diferencias y particularidades propias de cada cultura, marcando el periodo previo al inicio de la cuaresma cristiana entre los meses de febrero y marzo. Ahora bien, no podemos hablar de carnaval sin mencionar uno de los más populares, alegres y coloridos del mundo: el de Río de Janeiro, Brasil.
El origen del carnaval no tiene un origen certero, pues su celebración viene de siglos atrás, sin embargo, se sabe que la Iglesia en la antigua Roma permitía todo tipo de excesos y descontrol en comida y bebida hasta el día Miércoles de ceniza, por lo cual la palabra en latín carnevale significaría “abandonar la carne”, como una referencia a que a los días posteriores no se podría consumir este alimento y se tendría que llevar una vida mesurada.
Ahora bien, ¿cómo llega el carnaval a Brasil? La llegada de los portugueses a tierras sudamericanas significó un enorme encuentro multicultural. La tradición europea del uso de disfraces y máscaras en el carnaval, junto con la música y danza de los esclavos africanos que fueron llevados a este país, dieron como resultado en gran medida el carnaval que conocemos hoy.
Pero hablando concretamente del carnaval de Río de Janeiro, este dura cuatro días, en los cuales la ciudad recibe visitantes de otras regiones de Brasil y del mundo. Todo inicia con la coronación del Rey Momo, quien recibirá las llaves de la ciudad, sin embargo, el evento más esperado por todos es el desfile en el gran Sambódromo Marques de Sapucaí, en el cual las escuelas de samba desfilan mostrando su preparación de todo un año.
Estas escuelas de samba eligen un tema que representarán en los festejos, y sobre el cual preparan su baile, la decoración de sus carros alegóricos y las brillantes y despampanantes trajes que usan durante el evento. No pasemos por alto, claro, que la samba es protagonista en este evento, pues este popular género musical es el que ambienta y acoge este bello desfile.
Además de apreciar las movidas coreografías que presentan los participantes, también se puede admirar el trabajo en artes plásticas, pintura y diseño de los carros y escenografías, así como arte teatral que los artistas interpretan al presentan su performance de acuerdo al tema elegido, el cual suele evocar a la memoria colectiva cultural del pueblo brasileño.
Sin embargo, el baile y festejo no se limitan a los eventos del sambódromo, ya que durante los días de carnaval, es muy común ver por las fiestas en las calles o playas de la ciudad, llamados “blocos”, o bien, los amigos y familias se organizan para celebrar en reuniones privadas.
Este año, 2023, comienza este 17 de febrero, y se espera que más de 150 blocos sean organizados, así como la asistencia de miles de personas de todo el mundo para disfrutar de esta experiencia única y llena de color y alegría como solo Brasil lo sabe ofrecer.